Cuando hablamos de drogas, nos referimos a sustancias que consumimos de forma oral, o intravenosa. Sin embargo, existe una nueva y peligrosa moda entre la población más joven: escuchar sonidos que producen alteraciones en nuestro cerebro y cuyos efectos son muy parecidos a los de las drogas más comunes. Esta nueva moda puede resultar arriesgada de probar, a pesar de que no existen evidencias científicas en relación a su adicción, muchos expertos afirman que las drogas auditivas pueden producirnos sensaciones de mareo, confusión y estados alterados ligeramente parecidos a las sensaciones que nos producen drogas como la marihuana, cocaína, LSD, etc.
¿Cómo funcionan estas drogas?
Cuando escuchamos una de estas llamadas drogas auditivas, la zona meso-límbica del sistema nervioso se altera. Esta zona es la encargada de gestionar y regular los estados de activación, relajación y nuestras emociones. Por lo tanto, cuando alteramos esta zona, el funcionamiento de nuestro cerebro se ve modificado produciendo así, una sensación de mareo y confusión parecido al efecto de las drogas.
¿Qué consecuencias tiene el uso de etas drogas?
En resumen, a grandes rasgos, los efectos de las drogas auditivas son:
Vértigo
Dolor de cabeza o cefalea
Nerviosismo
Crisis de ansiedad.
Relajación y confusión
Mareos
Náuseas
Sin embargo, a diferencia de otro tipo de sustancias, las drogas auditivas parece que no producen adicción.
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