Todos conocemos a alguna persona que siempre se esta quejando, aquellos que siempre se quejan del clima, de lo que hacen mal los otros, de lo que otros postergan, del como piensan los demás, del transporte, etc. De esas personas que nada los mantiene contentos y que por cualquier motivo por muy mínimo que sea les provoca la necesidad de quejarse.
La persona que se instala en la queja invierte su tiempo en quejarse de manera continua y recurrente, aunque lo haga de si mismo o de los que lo rodean por lo que es normal que solo vean los aspectos negativos de los demás y enfoquen su energía en buscar que recriminar a los demás.
¿Cuál es el motivo por el cual este tipo de personas se quejan?
Existen diferentes y variados motivos para quejarse por cualquier cosa, pero en realidad esta práctica nace de un habito, pero existen 3 motivos en los cuales podemos englobar de que trata habito tan singular:
La primera razón es la insatisfacción, una persona que se queja del calor, del frío o de cualquier cosa no posee una razón que le de sabor a su vida.
La segunda razón es el habito, es decir, un comportamiento heredado por los padres, estas personas llegan a asumir sus lamentos como parte esencial de su comunicación lo que los lleva a no saber romper el hielo de ninguna otra forma.
La tercera razón es el egocentrismo o la falta de empatía a los demás. Las personas que se viven quejando sienten que merecen mas que las otras personas y al no obtenerlo se quejan. Además de que generan una incapacidad de ponerse en los zapatos de los otros. Es común que estas personas asuman que lo que hacen los otros sea únicamente con la intención de perjudicarlos o contrariar sus planes.
¿Sabias qué existen varios tipos de quejas?
Las quejas pueden organizarse según la forma en que se manifiestan:
Queja crónica: normalmente utilizadas por personas que jamás están satisfechas. Estas personas cuando reflexionan de su vida solo se centran en aspectos negativos. Este habito incluso puede re cablear el cerebro, consolidando las conexiones neuronales de la queja a despecho de otras mas eficaces, como aquellas que nos permiten solucionar problemas.
Queja de validación emocional: son las que utilizan las personas que desean hacer público su insatisfacción emocional. El sujeto se centra en las experiencias negativas, buscando captar la atención de los demás, detallando su mala suerte o su frustración. Lo mas común es que estas personas no busquen soluciones sino validar sus emociones y al mismo tiempo contagiar su negatividad.
Quejas instrumentales: Este tipo de queja busca expresar directamente su insatisfacción y malestar. Suelen quejarse menos que los demás, pero utilizan el lamento para llamar la atención sobre el problema que desean resolver. Es decir que buscan solucionar un problema no planteándolo de manera asertiva, sino como un reproche.
¿Conoces cuales son los problemas que acarrea ser una persona que vive de las quejas?
Las personas que invierten su energía y tiempo en quejarse de todo lo que les rodea normalmente tienes algunas de las siguientes características:
La queja conduce al inmovilismo: las personas normalmente se quejan tanto sin buscar una solución a los problemas
La queja genera un estado de animo negativo: todo evento es percibido como un limitante, algo incomodo y dañino, lo que no permite ver el lado positivo de cada situación.
Las quejas desgastan la energía: los sujetos suelen vivir en eventos del pasado, por las oportunidades no aprovechadas lo que implica que se enfoque la energía en cosa que ya no tiene importancia.
Las quejas impiden la búsqueda de soluciones: El individuo que se envuelve en la queja no es capaz de apreciar y aprovechar las oportunidades para arreglar los errores.
Las quejas afectan las relaciones interpersonales: las personas que viven propagando sus problemas normalmente son evitadas por quienes no soportan meterse en los problemas de los demás.
La queja conduce a tener una visión negativa del mundo y de las personas que los rodean, esto lleva al individuo a creer que todo lo que los otros hacen es llevado a cabo con el motivo de generarle un conflicto.
La queja conduce al cansancio, la desmotivación y desilusión: la persona que se queja suele actuar como un vampiro de energía para su entorno como para si misma.
Normalmente la persona que se queja todo el tiempo no es consciente de ello, en un primer momento la queja pudo haber surgido por un motivo razonable, pero esto lo llevo a encontrar en la queja un mecanismo valido para manipular a los demás.
¿Cómo cambiar el mal habito de siempre quejarse?
El primer paso para deshacer este habito es ser consiente de que uno mismo esta instalado en la queja, este habito, aunque es evidente para las personas que están en el entorno, difícilmente es reconocido para uno mismo. Por ello es indispensable ser consiente y analítico con el discurso o los comentarios propios e incluso los de los demás para ver si uno vive centrado en encontrar soluciones o de forma contraria solo esta enfocado en los problemas.
En segunda instancia es importante tener presentes los beneficios que se obtienen de las quejas para así decidir si son prescindibles para si mismos.
Una vez claros los puntos anteriores es importante reducir las quejas, ser consiente cada vez que se realicen las quejas para modificar el pensamiento o la frase por un mensaje mas positivo o resolutivo. Lo esencial es dejar el mensaje pasivo de la queja, para poder pasar a la acción es decir hacer consiente la razón de la cual se genera la queja y valorar que puedo llegar a hacer con ello.
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